VITERBO
La procesión con el icono del Santo Salvador, colocado en un carro agrícola tirado por bueyes, tiene lugar el sábado anterior al segundo domingo de mayo en el centro histórico de Viterbo, partiendo de la iglesia de Santa Maria Nuova, donde se conserva y venera el tríptico, y regresando a ella. El icono del Santo Salvador, según la tradición, fue encontrado milagrosamente por dos campesinos que araban un campo cerca de Viterbo en 1283. Los estatutos de la ciudad de 1344 recogen las normas de la procesión (convocatoria, itinerario, orden de los participantes…), que tuvo lugar la tarde del 14 de agosto.
Durante mucho tiempo, el icono del Santo Salvador fue llevado en un carro procesional, que fue sustituido en el siglo pasado por una carroza decorada con composiciones florales y precedida por una procesión de recuperación histórica con varias docenas de participantes, que representaban la primitiva participación de los gremios de artes medievales que desfilaban detrás de sus estandartes.
La procesión es el resultado de una larga preparación, desde los trajes de los participantes hasta la meticulosa elección de las flores, con las que se preparan los adornos que se colocan junto al Santísimo, así como los festones y las cestas de hierbas.
Aproximadamente una hora antes del inicio de la procesión, en la plaza situada frente a la iglesia de Santa Maria Nuova, donde se guarda y venera el Santo Icono, se transporta una pareja de bueyes de la Maremma que se unirán a la carreta. A continuación, el tríptico es izado en el centro del carro. A la hora señalada, comienza la procesión, con los tamborileros, el histórico y evocador desfile de los gremios de las artes, las cofradías, el clero, los jinetes a caballo, que recuerdan el arte de los “bifolchi” y, por último, el carro tirado por bueyes conducido por dos pastores.
Tras pasar por el barrio medieval de San Pellegrino, la procesión se dirige a la plaza del Plebiscito, donde se detiene para recibir el saludo y el homenaje del alcalde de la ciudad y de las autoridades. A continuación, vuelve a la plaza de Santa Maria Nuovo. El tríptico del Santo Salvador es retirado de la carreta y llevado a la iglesia, donde se celebra después la Santa Misa.
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La procesión con el icono del Santo Salvador, colocado en un carro agrícola tirado por bueyes, tiene lugar el sábado anterior al segundo domingo de mayo en el centro histórico de Viterbo, partiendo de la iglesia de Santa Maria Nuova, donde se conserva y venera el tríptico, y regresando a ella. El icono del Santo Salvador, según la tradición, fue encontrado milagrosamente por dos campesinos que araban un campo cerca de Viterbo en 1283. Los estatutos de la ciudad de 1344 recogen las normas de la procesión (convocatoria, itinerario, orden de los participantes…), que tuvo lugar la tarde del 14 de agosto.
Durante mucho tiempo, el icono del Santo Salvador fue llevado en un carro procesional, que fue sustituido en el siglo pasado por una carroza decorada con composiciones florales y precedida por una procesión de recuperación histórica con varias docenas de participantes, que representaban la primitiva participación de los gremios de artes medievales que desfilaban detrás de sus estandartes.
La procesión es el resultado de una larga preparación, desde los trajes de los participantes hasta la meticulosa elección de las flores, con las que se preparan los adornos que se colocan junto al Santísimo, así como los festones y las cestas de hierbas.
Aproximadamente una hora antes del inicio de la procesión, en la plaza situada frente a la iglesia de Santa Maria Nuova, donde se guarda y venera el Santo Icono, se transporta una pareja de bueyes de la Maremma que se unirán a la carreta. A continuación, el tríptico es izado en el centro del carro. A la hora señalada, comienza la procesión, con los tamborileros, el histórico y evocador desfile de los gremios de las artes, las cofradías, el clero, los jinetes a caballo, que recuerdan el arte de los “bifolchi” y, por último, el carro tirado por bueyes conducido por dos pastores.
Tras pasar por el barrio medieval de San Pellegrino, la procesión se dirige a la plaza del Plebiscito, donde se detiene para recibir el saludo y el homenaje del alcalde de la ciudad y de las autoridades. A continuación, vuelve a la plaza de Santa Maria Nuovo. El tríptico del Santo Salvador es retirado de la carreta y llevado a la iglesia, donde se celebra después la Santa Misa.
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